«La ciudad de la memoria» es el sugerente título de la nueva novela de Santiago Álvarez, publicada por Almuzara en su serie Tapa negra dedicada al género policíaco. Con Valencia como telón de fondo, se nos presenta a un detective entrañable y enamorado del cine que se verá sumergido en los turbios asuntos de una idílica familia de gran poderío económico.
Berta Valero, es una joven estudiante de periodismo, llega tarde a la entrevista de trabajo. Se ha vestido para la ocasión, lejos de su estilo desenfadado ahora se siente incómoda con su traje de chaqueta. Sufre serias estrecheces económicas, lleva meses buscando un empleo a tiempo parcial pero no sale nada. Llegó a Valencia hace diez meses huyendo del mundo rural y llena de ilusión, pero sin un ingreso extra no podrá mantenerse ni seguir con sus estudios, puesto la exigua beca da para poco. Tal vez si supiese en que vorágine va a convertirse su vida volvería al pueblo a seguir la existencia predecible de la que ha huido.
Mejías es detective privado, necesita una secretaria y la imaginación de la soñadora Berta ha añadido lo demás. El [pullquote-left] «Berta llegó a Valencia hace diez meses huyendo del mundo rural y llena de ilusión, pero sin un ingreso extra no podrá mantenerse ni seguir con sus estudios» [/pullquote-left]descubrimiento de la astrosa oficina y del más desastrado y maduro detective cubierto con una raída gabardina marrón, que vive a espaldas de la tecnología y también de la realidad, refugiado en el whisky, sus vinilos de Billie Holiday; Chet Baker.. y cintas de vídeo de Bogart, MacMurray o Mitchum, no desanimará a la jovencísima Berta, tampoco la suciedad y el abandono de la oficina. Ella está ansiosa por aprender y necesitada de ganar algún dinero así que acepta el trabajo.
Pronto se encontrarán con un caso: Dugo-Escrich propietario del mayor grupo constructor valenciano, está furioso. Ha desaparecido “Armando”, es un yaco del Congo, un loro mal hablado con el que el dueño está muy encariñado, y que portará un extraño mensaje. Nuestro detective será el encargado de dar con el animal extraviado.
Cuando la familia quiere quitarse de encima a Mejías, por considerarlo molesto y entrometido, les resultará imposible. Como buen sabueso ha olfateado una presa y está dispuesto a seguir el rastro hasta descubrir qué se esconde tras el anodino encargo. Mejías desoye a quienes le aconsejan que se aparte del asunto, puede perder no solo la licencia, también la vida.
Comienza así una novela en la que nuestro par de atípicos investigadores irán descubriendo que lo que parecía un caso sin importancia esconde trapos sucios de esta supuestamente idílica familia, asuntos oscuros en los negocios y una historia muy antigua que no quieren que salga a la luz.
Entre diálogos chispeantes y escenas rocambolescas dignas de un sainete se nos desvelará una realidad dura. Nos encontraremos con policías corruptos, magos de las finanzas que se convierte en millonarios a costa del sueño y la ruina de otros. Familias socialmente [pullquote-right] «Mejías es detective privado, necesita una secretaria y la imaginación de la soñadora Berta ha añadido lo demás. » [/pullquote-right]ejemplares y envidiadas, en su intimidad desestructuradas y auténticos buitres carroñeros en busca del dinero al que cada cual se considera con derecho exclusivo sin dudar en llegar al crimen si es necesario.
El jefe del clan apodado el “Rey Arturo” es una persona impenetrable y dura que ha sufrido tres atentados, ahora se mueve en una silla de inválido escoltado por su fiel mayordomo Klaus. El proyecto “Cíclope” un plan ambicioso y calenturiento con todos los colores de una estafa. La Clínica Cubells, donde un desconocido permanece mantenido con vida desde hace años, todo esto y mucho más incrementarán el misterio que rodea el caso.
Mejías, alérgico ycon su imprescindible inhalador siempre a mano, es un detective entrañable. Fue policía. Hace años que un fracaso le hundió personal y profesionalmente. Enamorado del cine negro, este romántico personaje que se ha refugiado en otro tiempo se cree con frecuencia un Humphrey Bogart cualquier. Caerá rendido ante los encantos de la ambigua y bella Carlota que el caso pondrá en su camino.
La jovencita Berta no se resignará a utilizar la vieja Olivetti que es la reina de la oficina y casi lo más moderno que hay en ella, tampoco a [pullquote-left] «Entre diálogos chispeantes y escenas rocambolescas dignas de un sainete se nos desvelará una realidad dura». [/pullquote-left]ser una figura secundaria en su trabajo y fácilmente manipulable como pretende su jefe. Introducirá en el despacho no solo nuevas tecnologías, también su despierta inteligencia, alegría y vida que tan necesarias son, sin olvidarnos de Zero el castigado gato callejero que les adopta. También llevará su viejo coche, sus dotes excepcionales de conductora, que resultarán imprescindibles en las persecuciones y su memoria eidética que la convierte en especialmente idónea para su trabajo.
Los dos llegarán a formar un tándem perfectamente compenetrado y entrañable. Berta quería emociones y os aseguro que las va a tener y conseguirá penetrarar en la corteza pétrea del duro Mejías que llegará a apreciarla como si fuese una hija. Las sombras del pasado cobrarán vida propia y para Berta su trabajo se convertirá en un reto al que no puede dar la espalda.
Un nuevo socio más peculiar que nuestra pareja se unirá al tándem, entonces empezaremos a preocuparnos en serio. También los muertos estarán más presentes que nunca y disfrutaremos de su propia cita.
«Cuando más tarde trató de razonarlo, dedujo que el mareo se había debido a la agresiva mezcla de trementina y aguarrás que impregnaba el aire. No fue hasta mucho después, una vez todo hubo terminado, cuando reconoció como causa de la impresión la espalda de la mujer sentada frente al lienzo. Vestía un jersey negro muy fino, de cuello vuelto que acentuaba sus formas cuando se inclinaba sobre la pintura con el diligente brazo arremangado bajo el codo. Desde su cabeza se derramaba un río de rizos naranjas, contenidos por una heroica goma plástica.»
Como telón de fondo Valencia. Recorreremos la bella ciudad siguiendo las pesquisas de nuestros detectives, que irán descubriendo ante nuestros ojos toda una trama de secretos antiguos, que se remontan al siglo XVIII, a Argentina. Descubriremos mentiras, crímenes y venganzas que se han mantenido vivas a través de generaciones, y a nuestro detective que con frecuencia lo convertirán en un Ecce Homo.
Es una historia que reúne todos los requisitos de la novela negra. Es un relato divertido, corrosivo y romántico que se lee con gran placer y sabe a poco. Un reconocimiento a otras épocas, una denuncia de la actual, con unos protagonistas que llegas a sentir muy tuyos, tantos los buenos como los malvados (requisito imprescindible de las novelas negras norteamericanas que nos hicieron soñar). Una evocación al pasado y al presente de una ciudad, Valencia, que el autor ama y que no tiene secretos para él y que conseguirá hacernos amar.
De trescientas noventa y seis páginas, tiene veintitrés capítulos, cada uno comenzará con una alusión cinematográfica relacionada con el contenido. Sus diálogos son ingeniosos y logrados, la trama es trepidante, bien ordenada, sin decaer en ningún momento y el final es como una traca que explosiona ante nuestros ojos. Es una historia bien contada y documentada. Esperemos que pronto podamos disfrutar de las nuevas aventuras de este par de entrañables detectives, La Ciudad de la Memoria me ha dejado con ganas de ello.
Autora:
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BIOGRAFÍA DEL AUTOR: SANTIAGO ALVÁREZ
(Murcia 1973) reside en Valencia desde 2001. Es el director de contenidos del festival del género Valencia Negra. Se inició en la literatura escribiendo relatos, muchos de los cuales han sido premiados en diversos certámenes. Ha escrito, dirigido y protagonizado y dirigido musicales y obras gramáticas y ha grabado varios discos con distintos grupos y formaciones. Asimismo, imparte numerosos talleres sobre escritura crativa y es el primer profesor en España de software para escritores Scrivener. La Ciudad de la Memoria es su primera novela, aunque ya prepara nuevas aventuras para sus protagonistas Berta y Mejías.